Esta receta de brócoli al horno con queso parmesano y limón le quita lo aburrido al brócoli y lo convierte en un platillo crujiente y caramelizado en 40 minutos o menos. ¡Delicioso!
1/4taza dequeso Parmesano recién rallado (1 onza, ver nota 3)
Instructions
Coloca la rejilla del horno a la mitad y precaliéntalo a 400 ℉. Cubre una charola (que tenga bordes) con papel de aluminio o papel para hornear, para facilitar la limpieza.
En un recipiente hondo grande mezcla el brócoli, aceite de olivo, ajo, jugo de limón y sal y pimienta al gusto (yo uso al menos ½ cucharadita de sal y ¼ de cucharadita de pimienta; a veces un poco más).
Acomoda la mezcla de brócoli en la charola preparada. Hornea hasta que los racimos de brócoli estén cocidos, crujientes y dorados, unos 35-40 minutos.
Sácalos del horno y espolvoréalos con queso parmesano rallado. Revuelve para que se cubran bien. Mételos de nuevo al horno hasta que se funda el queso, entre 1 minuto y 2.
Notes
Porciones: Esta receta rinde unas 8 tazas de brócoli asado, suficiente para 8 raciones.
Almacenamiento: Puedes guardar las sobras en el refrigerador por hasta 4 días. También puedes usar el brócoli restante en omelettes o huevos revueltos.
Prepara antes: Pica el brócoli con hasta 3 días de anticipación. Guárdalo en el refrigerador en un contenedor cerrado hasta que estés listo para hornear.
Fórmula para temperaturas altas: Yo horneo todos los vegetales a 400 ℉ y modifico el tiempo según sea necesario (hay que observar constantemente). Pero recuerda la regla de Fahrenheit 451: si los libros se queman a 451 ℉, también el papel para hornear. Por eso mi punto de partida son los 400 ℉, aunque algunos vegetales se hornearían más pronto a temperaturas más altas.
Mantén todo seco: Después de enjuagar los vegetales, sécalos con una toallita desechable o deja que se sequen antes de meterlos al horno. Mientras más humedad, más vapor y mientras más vapor, menos partes crujientes.
Control de población: Si pones muchos vegetales muy juntos se va a crear vapor que va a impedir que adquieran esa textura crujiente. La superficie de contacto con la charola es lo que les da a los vegetales esa parte dorada y crocante. También, cuando haya pasado la mitad del tiempo, voltea tus vegetales, para que ambos lados queden deliciosos.
Para hornear brócoli congelado: Puedes hornear brócoli congelado directo de la bolsa, pero subiendo la temperatura a 450 ℉. No dejes que se descongele primero, porque se volverá suave y nunca va a alcanzar la textura crujiente.
Más combinaciones: Espolvorea el brócoli con almendras tostadas, tocino cocido o una pizca de chile seco.